jueves, 22 de noviembre de 2012

Sucedió en el Serengueti

Lo que estáis a punto de leer es un cuento elaborado por Álvaro Marrón aprovechando el puente de comienzos de Noviembre, el de los Santos.
No guarda relación con la fecha, porque no es lo que se pidió, pero es digno de leer. ¡Adelante!

"Un día soleado en el Serengueti estaba un león (uno de los depredadores más rápidos) junto con su manada sentado bajo la copa de un árbol cuando, de repente, salió un antílope marrón, con cuernos muy largos, que fue cazado por los leones. Se lo llevaron entre todos a la guarida para comérselo. No dejaron ni pizca de carne.
Al día siguiente llegó un hombre muy fuerte, con sombrero de campo y, sobre todo, un coche muy grande, el típico que se ve en las sabanas. Se trataba de un reportero de la 2, que quería investigar sobre los leones. El león, que lo vio, se puso de pie y le dijo:
- Hola reportero, ¿para qué has venido?
- Para investigar a vuestra manada.
- Vale, pasa
- Muchas gracias

Al cabo de un rato ya los tenía entrevistados a todos. Los leones se emocionaron porque iban a salir por televisión. Cuando se hizo de noche el reportero se tenía que ir de vuelta a Madrid para llevar consigo la investigación. Llegó a su casa a dormir y mientras pensaba todo lo que le gustó el Serengueti, se le vino a la mente el volver, ya que los leones fueron tan amables y buenos que se dijo: "sí, quiero volver".

A la mañana siguiente fue a la redacción de la 2 para pedir unas vacaciones que le correspondían. Se las dieron y cuando salió de allí se fue directo al aeropuerto. Pasaron días y días hasta que llegó donde él quería, le costó encontrar a sus amigos, pero en cuanto los vio les gritó:
- ¡Holaa! ¡Aquí!
- ¡Hola! ¿Eres el reportero que viniste aquí?
- Sí, soy yo
- Bueno, ¿qué tal?
- Bien, quisiera contarle algo a vuestra manada.
- Sí, dinos, por favor.
- Quisiera quedarme unos días en vuestra estupenda familia.
- Muy bien. ¡Claro que te dejamos! Pero con una condición... que nos ayudes a todo lo que hagamos, a cazar, jugar y, sobre todo, curarnos si nos atacan.
- Eso está hecho. Muchas gracias

El reportero ya era compañero y amigo de aquellos animales, pero cuando se preparaban para jugar, un puma negro y esbelto atacó al reportero, pero los leones le protegieron. Él se quedó alucinado al ver que sus amigos le protegieron. Pasó la semana muy bien con ellos, pero se le acabaron las vacaciones y tuvo que volver, aunque ahí le quedaron amigos para toda la vida."

¿Qué os ha parecido? ¿Apreciáis el mensaje que quiere transmitir Álvaro?


2 comentarios:

  1. Me ha gustado mucho. Sigue así. Quién sabe a lo mejor en un futuro puedes llegar a ser un brillante escritor. Ánimo

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  2. Muy chulo el cuento y un blog muy interesante. Seguid así

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